Teoría de la jerarquía de necesidades
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Grupo de estudio Psicología Transpersonal Bs.As. |
Probablemente estemos en lo cierto al decir que la
teoría más conocida de la motivación es la jerarquía de necesidades de Abraham
Maslow. Él presenta la hipótesis de que dentro de todo ser humano existe una
jerarquía de las siguientes cinco necesidades.
Fisiológicas: incluye el hambre, la sed, el abrigo,
el sexo y otras necesidades corporales
De seguridad: incluye la seguridad y protección de
daños físicos y emocionales.
Sociales: incluye afectos, la sensación de
pertenencia, aceptación y amistad.
De Ego: incluye factores internos de estima, como
el respeto a uno mismo, la autonomía y los logros; y factores externos como el
status, el reconocimiento y la atención.
De autorrealización: el impulso de ser lo que se es
capaz de ser; incluye el crecimiento, alcanzar el potencial de uno y la
autosatisfacción.
Esquema de las Necesidades
A medida que se satisface cada una de estas
necesidades en lo sustancial, el siguiente nivel de necesidades se vuelve
dominante. En términos de la figura, el individuo sube por los escalones de la
jerarquía. Desde el punto de vista de la motivación, la teoría indica que,
aunque ninguna necesidad se satisface siempre, una necesidad que ha quedado en
gran parte satisfecha ya no motiva. De manera que si uno desea motivar a alguien,
de acuerdo con Maslow, necesita comprender en qué nivel de la jerarquía está
en la actualidad, y enfocarse a la satisfacción de las necesidades en ese nivel
o el siguiente superior.
Maslow separa las cinco necesidades en órdenes
superior e inferior. Describió las necesidades fisiológicas y de seguridad como
de orden inferior, y las sociales, de estima y de autorrealización como
necesidades de orden superior. Esta diferenciación entre los dos órdenes se
hizo a partir del criterio de que las necesidades de orden superior quedan
satisfechas en lo interno (dentro de la persona), mientras que las necesidades
de orden inferior quedan satisfechas predominantemente en lo externo (por el
pago, los contratos sindicales y el ejercicio de un puesto, por ejemplo). De
hecho, la conclusión natural a la que se debe llegar partiendo de la
clasificación de Maslow es que, en tiempos de abundancia económica, casi todos
los trabajadores con empleos permanentes han satisfecho de manera considerable
sus necesidades de orden inferior.
La teoría de las necesidades de Maslow ha recibido
un amplio reconocimiento, en particular entre los administradores
profesionales. Se puede atribuir esto a la lógica intuitiva y a la facilidad
de su comprensión. Sin embargo, por desgracia, la investigación no respalda en
general dicha teoría. Maslow no proporcionó una verificación empírica, y
varios estudios que intentaron respaldar su teoría encontraron que no había
apoyo para la misma.
Las viejas teorías, en especial aquellas que son intuitivamente
lógicas, parecen difíciles de abatir. Un investigador revisó la evidencia y
llegó a la conclusión de que aunque tiene una gran popularidad en la sociedad,
la jerarquía de necesidades, como teoría, continúa recibiendo poco apoyo
empírico”. Además, el investigador concluyó que “la investigación disponible
ciertamente debe hacer que estemos renuentes a aceptar sin reservas las
implicaciones de la jerarquía de Maslow” ·
Otra revisión llegó a la misma conclusión. Se ha encontrado poco
respaldo para la predicción de que las estructuras de las necesidades estén
organizadas de acuerdo con las dimensiones propuestas por Maslow, de que las
necesidades insatisfechas motiven, o que una necesidad satisfecha active el
traslado a un nuevo nivel de necesidades.